“Un concepto que no sólo cuenta con una parte de exposición de producto, sino que ofrece una experiencia atractiva y generadora de engagement.”
La campaña de Navidad es el tiempo de regalos por excelencia. En estas fechas las marcas desatan su potencial creativo en busca de nuevas formas de acercarse a sus clientes para mostrarles las bondades de sus productos. Este año Google lo ha conseguido con las Winter WonderLab.
Se trata de seis espacios efímeros (cerrarán puertas durante la Noche Buena), ubicados en distintas ciudades de Estados Unidos, donde los clientes puedan probar y comprar productos Nexus, Chromebooks y Chromecast, marcas todas ellas de Google. Pero hay más: como toda pop up que se precie, el concepto Winter Wonderlab no sólo cuenta con una parte de exposición de producto, sino que ofrece una experiencia atractiva y generadora de engagement.
Como vemos, la experiencia Winter Wonderlab ofrece la oportunidad de crear una vídeo-felicitación navideña de tan sólo un segundo de duración (eso sí, a embellecedora cámara lenta). El montaje no tiene desperdicio: iglú a tamaño real, nieve digital, decoración navideña, slow-motion, música para elegir a gusto de cada uno… ¡Y todo ello conectado a las redes sociales para difundir el mensaje!
¿Qué ha conseguido Google a través de esta acción? En primer lugar, atraer a potenciales clientes a su establecimiento. La gente, deseosa de crear su propia felicitación navideña al estilo Matrix, se ha acercado a las pop up store no sólo a tocar y probar los productos de la firma, sino a vivir la experiencia Google.
En segundo lugar, la viralización del video ha llevado la experiencia Winter Wonderlab más allá de las tiendas. Google se ha marcado el tanto de impactar a un público que, a pesar de no haber tenido acceso a las tiendas en sí, ha sentido la experiencia Winter WonderLAb de forma no intrusiva, a través de un mensaje de un amigo o un familiar.
En definitiva, estamos ante una gran acción de generación de reputación y notoriedad de marca que aprovecha unas fechas clave para todas las empresas. La única duda que nos queda es: ¡¿cuándo podremos vivir una experiencia Google aquí?!