En las últimas décadas, ha aparecido mucha información acerca del calentamiento de la tierra, el fin de los recursos energéticos, el daño medioambiental de ciertas formas de consumo… Debido a ello, poco a poco el consumo responsable y el desarrollo sostenible se están expandiendo en todo el mundo.
Cada vez con mayor fuerza, la consciencia sobre nuestro entorno está marcando nuestro estilo de vida y formas de consumo. Como consumidores, nos sabemos responsables directos de los impactos sociales y ambientales de la producción de los productos que compramos. Por ello, exigimos a las marcas que cumplan una serie de requisitos:
• Producción sostenible: antaño considerado una ventaja competitiva para las marcas, actualmente este patrón debe considerase un valor intrínseco, integrado en el ADN de la marca.
• Consumo responsable: queremos que consumir sus productos signifique un cambio en nuestra forma de pensar y nuestra actitud.
Son muchas las marcas que se han sumado a esta tendencia y que comparten esta preocupación. Por ello, desde varios flancos se están desarrollando proyectos que incentivan el consumo sostenible y frenan el innecesario. Además, son proyectos que no se limitan a reducir el impacto sobre el entorno, sino que desarrollan fórmulas para mejorarlo.
Hoy por hoy, las personas eligen comprar con el corazón, relegando el precio en segundo plano.
Un ejemplo de ello es Levi’s y su nueva colección de tejanos hechos a partir de botellas recicladas:
http://www.youtube.com/watch?v=nj0-F7-Z2Hc
Puma, por otro lado, ha creado InCycle Collection, una línea de productos reciclables y biodegradables, certificados con el sello Cradle to Cradle. No contentos con ello, en colaboración con el estudio de diseño Fuse Project, la marca alemana ha diseñado la Clever little bag, un packaging mucho más sostenible que los habituales.
http://www.youtube.com/watch?v=j9zfkYHtuMc
En definitiva, proyectos como los citados hacen posible que el consumidor, a la vez que compra, defienda sus propios valores, que también son los de la marca. ¿Qué lectura deben sacar las marcas de todo ello? Está claro: hoy por hoy, las personas eligen comprar con el corazón, relegando el precio en segundo plano.