A los de marketing y publicidad nadie nos gana inventando “palabros”, una práctica que a veces genera más confusión que otra cosa. Es el caso del actual debate alrededor de los contenidos y la creatividad publicitaria. Unos hablan de branded content, los más audiovisuales hacen referencia a transmedia, otros dicen crossmedia, los tradicionales lo llaman brand experience… Pero, ¿de qué hablamos, en realidad?
El denominador común es un contenido de marca que no entiende de dispositivos y pantallas, pues está en todos, se adapta a todos, conecta con la gente desde cualquier plataforma. Estos son algunos de sus ingredientes imprescindibles:
• Es contenido líquido, se adapta a todos los medios disponibles.
• A pesar de su ramificación, es coherente en su conjunto. Así pues, cada parte complementa el mensaje final, la historia, a la vez que alimenta la conversación con la audiencia.
• Tiene varios niveles de profundidad, que conllevan distintas formas de implicación.
En TheMoodProject pensamos que, a pesar de terminologías varias, crear y saber usar este tipo de contenidos genera valor y conecta con los consumidores.
“Un contenido de marca que no entiende de dispositivos y pantallas, pues está en todos, se adapta a todos, conecta con la gente desde cualquier plataforma”
Experimenté el potencial de todo esto gracias al libro de Lucía Etxebarría Lo verdadero es un momento de lo falso. Después de su lectura, me metí en Facebook y vi que el protagonista del libro tenía su propio perfil. ¡Incluso se podía interactuar con él! Me quedé alucinada.
En este vídeo se resume muy bien lo que trato de explicar, y cómo ello se traduce en eficacia publicitaria:
Ahora bien, hay algo que me llama la atención. En España, casi todos los contenidos de este tipo están hechos por y para el sector del entretenimiento (cine, TV, literatura). El libro de Lucía Etxebarría es un ejemplo. Otro, los twittesodios de la serie El Barco. Las marcas, sin embargo, no dan el paso. Salvo el de Atrápalo y otros pocos, apenas existen casos de estudio en nuestro país.
¿Por qué nos cuesta tanto? Quizá nos faltan las historias. A lo mejor, los de marketing y publicidad necesitemos mezclarnos más con guionistas, escritores, pintores, incluso con físicos.
¿Tú qué opinas?
Photo credit: Juanedc / Foter.com / CC BY