Café Saula

Un café icónico que quiere llenar los hogares con su fórmula única

Café Saula es historia pura. Creada en 1950 por Lluís Saula y Maria Teresa Puig, y capitaneada en la actualidad por sus hijos Lluís y Joan Saula, la marca lleva más de medio siglo inundando calles, bares y restaurantes con aromas y sabores memorables.

En pleno siglo XXI, y con un afianzado reconocimiento en restauración, Café Saula se propuso aumentar su presencia en el mercado B2C. Una voluntad que requería buscar los significados más emocionales de la marca para definir un territorio competitivo propio y conectar así con un nuevo público de necesidades específicas.

Café con sello de autor. Café con todo el respeto.

A través de un método propio que se dividide en siete pasos, Lluís y Joan seleccionan, elaboran y tuestan cafés que contienen todo su saber. Una calidad organoléptica atemporal que quieren compartir con todos aquellos que decidan acompañarles en este viaje sensorial inigualable.

Esta manera única y personal de entender el café y sus rituales, construida a lo largo de toda su vida, pone el respeto en el centro de todo lo que hacen. Respeto por la tradición familiar, por un método único, por sus creaciones y el trabajo bien hecho; en definitiva, por la cultura del café.

Recetas elaboradas a base de sabiduría e inspiración

Para un autor, sus creaciones son una extensión de su propio ser, la materialización de sus ideas. Y por tanto, debíamos ser capaces de darles la importancia que merecían. ¿Cómo? Creando relatos específicos para cada una de ellas.

¿Qué papel jugaron los monzones durante su viaje a Asia a la hora de desarrollar la receta Dark India? ¿Qué momentos de su vida están recogidos en la receta Original? ¿Qué preocupaciones inspiraron la receta Ecológica? Las respuestas a estas preguntas nos guiaron y acompañaron durante el proceso de creación.

Para los que buscan en el café un torbellino de sensaciones

Esta propuesta de autor que impulsa la cultura alrededor del café conecta directamente con un tipo de consumidor que no lo entiende únicamente como una bebida estimulante. Porque CAFÉ es sinónimo de rituales, de recuerdos, de momentos.

Un tipo de consumidor abierto a probar nuevas variedades, que piensa que el café no se bebe, se degusta. Y que, por tanto, para evocar, debe ser capaz de mantener las mismas cualidades siempre, sin importar el paso del tiempo.

Palabras con buen sabor. Verbos que huelen a conocimiento

Para poder acercarnos a este tipo de público, a la vez que proyectábamos la personalidad de la marca, generamos un lenguaje propio centrado en lo que une a ambas partes: la pasión por el café.

Una manera de hablar que genera conexiones gastronómicas con nuestros sentidos y que nos hace viajar de la misma manera que lo hace Café Saula con sus cafés.

Además, este tono de voz nos permite transmitir conocimiento sin perder frescura y didáctica, y aportando valor a la cultura del café.

Imágenes que hablan de origen, de homenaje, de notas aromáticas

Para hacer realidad la nueva idea de marca, “Café con todo el respeto”, teníamos que apoyarnos en un nuevo estilo fotográfico que nos permitiera poner de relieve todo lo que esta esconde.

Los hermanos Saula implicados en todas las partes del proceso, el café y sus matices, escenarios evocadores de ayer y de hoy, personas llevando a cabo sus rituales de una manera plural…

Un contenido que mostramos de una manera limpia y ordenada, mientras jugamos con luces, sombras y actitudes serenas para reflejar el respeto que transmite la marca.

Café de calidad superior al alcance de todos

Uno de los puntos de venta más importantes para consolidar su posición en el mercado B2C era su página web.

Por ello, redactamos todo el contenido y realizamos la dirección de arte, mezclando funcionalidad (para dar respuesta a la parte comercial) y emoción (para generar conexiones duraderas entre la marca y el visitante).

De definir a comunicar

Definir la marca, planificar su camino, saber cómo va a comunicarse con los que, como ella, sienten verdadero respeto y pasión por el café… Todo eso hicimos, pero no sería nada, sino lo activáramos.

Por eso, una vez creada su identidad, diseñamos un plan de comunicación ad hoc. A partir de él, generamos formatos, plantillas y contenidos específicos que nos ayudaran a comunicar todo lo planificado en etapas anteriores.